Cuando lo cotidiano ya no es noticia.

(EN)

Cuando miras un objeto desde la distancia es imposible apreciar sus detalles.

Así, un observador extranjero podría pensar que el terrorismo de ETA es una guerrilla insurgente del pueblo vasco contra la ocupación del estado español, y yendo aún más lejos, equiparar al pueblo vasco con el terrorismo.

Nada más lejos de la realidad a día de hoy. Tanto en el diagnóstico del problema como en las posibles soluciones al mismo.

Igualmente, y desde la distancia, me niego a pensar que todos los palestinos son terroristas, si bien, en su caso, sí que podemos hablar de ocupación, bloqueo y apartheid por parte del estado de Israel.

Les han quitado sus tierras y les han desalojado de sus casas. Sufren continuas humillaciones por parte de los colonos y del ejército ocupante. Han sido utilizados como escudos humanos, bombardeados, despreciados por la justicia israelí, violados sus derechos...

De ninguna manera justifico la violencia de los milicianos de Hamás, que es noticia cada vez que lanzan cohetes contra los colonos judíos, pero la miseria de Gaza, la falta de escuelas, el terror a los registros policiales de viviendas, a los bombardeos, el infierno en que viven su día a día miles de familias conforman el ambiente más agresivo que uno pueda imaginar. Y en este ambiente miserable y violento es donde crecen los niños y niñas palestinos privados de toda libertad, sobre todo de la libertad que da la educación, y sin posibilidad alguna de poder desarrollarse como personas libres y sin miedo.